La transformación digital ha traído consigo cambios estructurales en diferentes frentes sociales y
el escenario educativo no ha sido la excepción. En ese camino ha tenido que librar una fuerte
discusión con las visiones tradicionalistas, que la califican como un distractor o un elemento que
no está en posibilidad de articularse a nuevas formas de enseñar. Por otro lado, hay quienes
conciben que la tecnología funciona como extensión pedagógica que facilita los procesos de
aprendizaje y ofrece contextos dinámicos más amenos para los estudiantes.
En medio de esta discusión aparece el concepto - Reinvent The Classroom o Reinventa el Salón de
Clase, el aula del futuro pero en el presente, proyecto guiado por HP Inc, Intel y Microsoft que
busca acompañar a las instituciones educativas en la transformación tecnológica, pedagógica y de
espacios, con el objetivo de desarrollar en los alumnos las habilidades y competencias del siglo
XXI. En pocas palabras el RTC abre la puerta a nuevas oportunidades a través de una educación más
conectada, flexible y tecnológica.
Comencemos por enunciar que, a través de la tecnología, la educación ha podido expandirse a través
de la red de internet, rompiendo así con los paradigmas de tiempo, ponderando así el acceso de un
sin número de usuarios al aprendizaje de forma virtual utilizando un computador, o ahora un
smartphone. Santiago José Castro Agudelo, colombiano que fue elegido como Chief Learning Officer del
Grupo Lottus Education, plataforma de educación superior que impulsa la transformación digital de
las instituciones en América Latina afirma que, “hay que superar esa lógica de “los mejores con los
mejores” y garantizar que todos, sin excepción, puedan acceder a educación de calidad y transformar
su vida".
En este sentido Luisa Fernanda López Ortiz, Project Manager del Grupo Advanced Education (GAE),
aliados de la Compañía Controles Empresariales y quienes ya implementaron un proyecto de RTC en un
colegio de Bogotá, afirma que entre los beneficios de la educación apoyada en la tecnología está
“que el aprendizaje cooperativo y colaborativo desde la mediación de las TIC mejora y se hace
transversalizado el trabajo por áreas del conocimiento con los docentes quienes diseñan y aplican
con sentido pedagógico”.
Y es que, según el Ministerio de Educación Nacional, este modelo educativo apoyado en la tecnología”
… implica una nueva visión de las exigencias del entorno económico, social y político, así como de
las relaciones pedagógicas y de las TIC. No se trata simplemente de una forma singular de hacer
llegar la información a lugares distantes, sino que es toda una perspectiva pedagógica”.
En Colombia estamos en ese proceso de transformación que implica cambiar perspectivas, y el sector
educación no será la excepción, por eso avances como los que propone HP Inc con su modelo RTC
promueven el apalancamiento de nuevas formas de enseñar. Este primer caso de RTC en Bogotá en el
Colegio Francisco de Paula Santander en la localidad de Bosa, es un ejemplo de cómo se pueden
derrumbar los mitos en torno a la tecnología como distractor y reemplazarlo por un ambiente que
permite explotar las capacidades de los alumnos incentivándolos a la investigación y realización de
proyectos en el marco de la transformación digital.
Según Luis David Tobón, director pedagógico de GAE Colombia, en este caso RTC de Bosa hubo un
proceso interesante de implementación.
“Hubo un primer paso, el Momento cero, que fue el estudio pedagógico realizado de forma cuantitativa
y cualitativa con el objetivo de entender la situación y contexto específico de la institución
educativa a intervenir. El objetivo de este análisis fue realizar un mapeado de los puntos críticos
que necesita la institución educativa desde el punto de vista formativo, para la implementación del
proyecto. Después vino la Sensibilización, en esta fase se dio un primer acercamiento a docentes y
al grupo de liderazgo establecido (Grupo Gestor) sobre su construcción pedagógica y tecnológica.
Esta fase se orientó hacia la sensibilización de los docentes, su participación en el proyecto y la
concienciación de la importancia de la transformación de las instituciones educativas como elementos
centrales de la sociedad.
Posteriormente, dice Tobón, siguió la etapa de Formaciones, con foco en la solución tecnológica
incorporada en el espacio, así como en las actividades pedagógicas alrededor del RTC. Es decir, la
aplicación de las herramientas tecnológicas y del espacio en el proceso pedagógico y didáctico de
aula. Finalmente, se dio el Momento uno, momento de análisis en el que se realizó un comparativo del
momento cero versus el actual para ver los avances tanto técnicos como formativos después de la
implementación del RTC.”
En este sentido, finaliza Tobón “hacia donde va el mundo hoy es a hacer un cambio en las
metodologías de trabajo de los docentes y los estudiantes desde el trabajo colaborativo, por
proyectos, aula invertida, de permitir que los estudiantes tengan sus propias sensibilidades y bajo
sus inteligencias trabajen por proyectos”.
En conclusión, dentro de 10 años o menos en Colombia el RTC debería ser lo aplicado en las prácticas
educativas gracias a la apropiación significativa de la tecnología como una solución integral,
porque le apunta al diseño, al mobiliario, a la tecnología, pero lo más importante y diferenciador,
a la formación de nuestros niños y jóvenes. Como lo afirmó Anthony Salcito, vicepresidente de
educación en Microsoft, en la conferencia anual de tecnología en la educación BETT en Londres el
pasado miércoles 22 de enero de 2020, esto representará un cambio significativo en la forma de
enseñar al interior de las escuelas, propiciando un escenario que exija hacer énfasis en métodos de
aprendizaje fuera del aula de clase.
La transformación digital ha traído consigo cambios estructurales en diferentes frentes sociales y
el escenario educativo no ha sido la excepción. En ese camino ha tenido que librar una fuerte
discusión con las visiones tradicionalistas, que la califican como un distractor o un elemento que
no está en posibilidad de articularse a nuevas formas de enseñar. Por otro lado, hay quienes
conciben que la tecnología funciona como extensión pedagógica que facilita los procesos de
aprendizaje y ofrece contextos dinámicos más amenos para los estudiantes.
En medio de esta discusión aparece el concepto - Reinvent The Classroom o Reinventa el Salón de
Clase, el aula del futuro pero en el presente, proyecto guiado por HP Inc, Intel y Microsoft que
busca acompañar a las instituciones educativas en la transformación tecnológica, pedagógica y de
espacios, con el objetivo de desarrollar en los alumnos las habilidades y competencias del siglo
XXI. En pocas palabras el RTC abre la puerta a nuevas oportunidades a través de una educación más
conectada, flexible y tecnológica.
Comencemos por enunciar que, a través de la tecnología, la educación ha podido expandirse a través
de la red de internet, rompiendo así con los paradigmas de tiempo, ponderando así el acceso de un
sin número de usuarios al aprendizaje de forma virtual utilizando un computador, o ahora un
smartphone. Santiago José Castro Agudelo, colombiano que fue elegido como Chief Learning Officer del
Grupo Lottus Education, plataforma de educación superior que impulsa la transformación digital de
las instituciones en América Latina afirma que, “hay que superar esa lógica de “los mejores con los
mejores” y garantizar que todos, sin excepción, puedan acceder a educación de calidad y transformar
su vida".
En este sentido Luisa Fernanda López Ortiz, Project Manager del Grupo Advanced Education (GAE),
aliados de la Compañía Controles Empresariales y quienes ya implementaron un proyecto de RTC en un
colegio de Bogotá, afirma que entre los beneficios de la educación apoyada en la tecnología está
“que el aprendizaje cooperativo y colaborativo desde la mediación de las TIC mejora y se hace
transversalizado el trabajo por áreas del conocimiento con los docentes quienes diseñan y aplican
con sentido pedagógico”.
Y es que, según el Ministerio de Educación Nacional, este modelo educativo apoyado en la tecnología”
… implica una nueva visión de las exigencias del entorno económico, social y político, así como de
las relaciones pedagógicas y de las TIC. No se trata simplemente de una forma singular de hacer
llegar la información a lugares distantes, sino que es toda una perspectiva pedagógica”.
En Colombia estamos en ese proceso de transformación que implica cambiar perspectivas, y el sector
educación no será la excepción, por eso avances como los que propone HP Inc con su modelo RTC
promueven el apalancamiento de nuevas formas de enseñar. Este primer caso de RTC en Bogotá en el
Colegio Francisco de Paula Santander en la localidad de Bosa, es un ejemplo de cómo se pueden
derrumbar los mitos en torno a la tecnología como distractor y reemplazarlo por un ambiente que
permite explotar las capacidades de los alumnos incentivándolos a la investigación y realización de
proyectos en el marco de la transformación digital.
Según Luis David Tobón, director pedagógico de GAE Colombia, en este caso RTC de Bosa hubo un
proceso interesante de implementación.
“Hubo un primer paso, el Momento cero, que fue el estudio pedagógico realizado de forma cuantitativa
y cualitativa con el objetivo de entender la situación y contexto específico de la institución
educativa a intervenir. El objetivo de este análisis fue realizar un mapeado de los puntos críticos
que necesita la institución educativa desde el punto de vista formativo, para la implementación del
proyecto. Después vino la Sensibilización, en esta fase se dio un primer acercamiento a docentes y
al grupo de liderazgo establecido (Grupo Gestor) sobre su construcción pedagógica y tecnológica.
Esta fase se orientó hacia la sensibilización de los docentes, su participación en el proyecto y la
concienciación de la importancia de la transformación de las instituciones educativas como elementos
centrales de la sociedad.
Posteriormente, dice Tobón, siguió la etapa de Formaciones, con foco en la solución tecnológica
incorporada en el espacio, así como en las actividades pedagógicas alrededor del RTC. Es decir, la
aplicación de las herramientas tecnológicas y del espacio en el proceso pedagógico y didáctico de
aula. Finalmente, se dio el Momento uno, momento de análisis en el que se realizó un comparativo del
momento cero versus el actual para ver los avances tanto técnicos como formativos después de la
implementación del RTC.”
En este sentido, finaliza Tobón “hacia donde va el mundo hoy es a hacer un cambio en las
metodologías de trabajo de los docentes y los estudiantes desde el trabajo colaborativo, por
proyectos, aula invertida, de permitir que los estudiantes tengan sus propias sensibilidades y bajo
sus inteligencias trabajen por proyectos”.
En conclusión, dentro de 10 años o menos en Colombia el RTC debería ser lo aplicado en las prácticas
educativas gracias a la apropiación significativa de la tecnología como una solución integral,
porque le apunta al diseño, al mobiliario, a la tecnología, pero lo más importante y diferenciador,
a la formación de nuestros niños y jóvenes. Como lo afirmó Anthony Salcito, vicepresidente de
educación en Microsoft, en la conferencia anual de tecnología en la educación BETT en Londres el
pasado miércoles 22 de enero de 2020, esto representará un cambio significativo en la forma de
enseñar al interior de las escuelas, propiciando un escenario que exija hacer énfasis en métodos de
aprendizaje fuera del aula de clase.
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